Xi Jinping viaja a Francia para denunciar Ucrania, los crímenes contra la humanidad y la guerra comercial

Visita de Estado de Xi Jinping, presidente de China, para celebrar el sexagésimo aniversario de las Relaciones diplomáticas entre París y Beijingy la intención de “desactivar” varias crisis básicas que afectan a toda Europa, incorporando sectores comerciales e industriales estratégicos, incorporando militarmente a Ucrania.

Jinping y su esposa van hoy a París. Fueron recibido en el aeropuerto de Orly por el Primer Ministro Galo, Gabriel Attal. Emmanuel Macron organizó varias reuniones de trabajo y una velada de gala en el Eliseo, el mes de la luna. Los Marte, el presidente francés y el presidente chino suelen reunirse varias veces en el Grand Tourmalet, la estación aquí famosa por ser la historia del Tour de Francia.

Macron fue invitado al presidente de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyenabordar juntos, ante Jinping, el gran problema del comportamiento de Pekín a nivel comercial, nacional, bilateral y multinacional.

El 24 de abril, la Comisión presentó un nuevo documento anunciando la apertura de una “investigación” sobre el comportamiento chino, “sobre las prácticas discriminatorias en nuestros mercados públicos e instalaciones industriales, incluidos los hospitales”. El as Tensiones subyacentes entre la UE y China. afectará al futuro del mercado global, que, en palabras de Macron, “afecta al futuro de toda Europa”.

La gran mayoría de los miembros de la UE, y Francia en particular, acusan a China de comportamiento “protector” en su gigantesco mercado interno y “agresivo” e “ilegal” en el mercado internacional. Desde la perspectiva franco-europea, Beijing protege su mercado interno y apoya a sus fabricantes en todos los sectores, desde los vehículos eléctricos hasta los juguetes, pasando por la energía solar, los textiles, la “moda” y el lujo.

Amenaza

Los grandes industriales y exportadores franceses, por su parte, enviaron a Macron varios documentos para subrayar su “preocupación”: el comportamiento chino es un llevando a Francia y a Europa cientos de miles de millones de euros, poniendo en peligro milleres de puestos de trabajo. Espera que el presidente tenga un “gesto”, un “detalle” que ayude a evitar el empeoramiento de las tensiones subyacentes.

Durante el diálogo trilateral, China, la UE y Francia, en el Eliseo, el mes de la luna, el presidente francés organizó una segunda etapa más «íntima», el martes, en el Gran Tourmalet, con numerosos micrófonos y cámaras del Eliseo, con al finalizar la dimensión bilateral de la visita de Estado, en memoria del establecimiento de relaciones diplomáticas Entre la Francia del general de Gaulle y la China de Mao, hace unos años, el 27 de enero de 1964.

Macron espera de Jinping el “gesto” de ciertos contratos industriales. Francia y China están presentes en el mercado mundial de armas. París desea obtener de Pekín la compra de productos industriales, favoreciendo así el crecimiento de la gran industria francesa del lujo en el gigantesco mercado chino.

Entre los actores comerciales, la visita de Estado del presidente chino también tenderá a tener una importante dimensión puramente militar y diplomática. Macron pedirá a Jinping que “intervenga” ante Vladimir Putin para “ayudar a una salida” a la guerra de Ucrania.

En su reciente discurso desde la Sorbona, la primera universidad nacional, Macron afirmó que Europa “para poder morir”, si no hablamos de medios militares, industriales y comerciales “indispensables”, repitiendo que Francia “puede no estar de acuerdo con el envío de tropas a los frentes ucranianos”. Moscú reaccionó con cierta agresión verbal ante estas acusaciones.

El alias privilegiado de Putin

En el poder del presidente francés, Jinping podría desempeñar un papel importante, como alias preferido de Putin, dirigiendo al líder ruso en una forma de «flexibilidad» que le permitiría «ponerse bien». La guerra de Rusia contra la independencia de Ucrania. La aspiración voluntaria francesa de poder convivir con la “amistad ilimitada” de la pareja Putin-Jinping, con muchos intereses comunes en el surgimiento de un nuevo orden mundial, donde Europa corre el riesgo de un informe islámico.

La visita de Estado de Jinping también despertó la más profunda preocupación de las organizaciones humanitarias internacionales. Observador de derechos humanos (HRW), por ejemplo, ha publicado varios documentos que contienen afirmaciones como ésta: “Los derechos humanos se han deteriorado gravemente en China bajo el régimen de Xi Jinping. El gobierno cometió graves crímenes contra la humanidad, detenciones masivas y persecución de minorías religiosas y culturales. El presidente Macron tendrá que subyugar al presidente chino para que estos crímenes tengan consecuencias para las relaciones de Beijing con París y toda Europa».