Libros y moda, un romance que impresiona

Libros y moda, un romance que impresiona

Ni chaquetas con hombros ni bolsos de piel granulada: en Saint Laurent Babylone, una boutique parisina abierta a principios de febrero en la rue de Grenelle, en el barrio de Saint-Germain-des-Prés, los clientes que buscan prêt-à-porter o accesorios afectados saldrá decepcionado. El espacio acristalado, gris e industrial, fue diseñado como el “destino cultural” de la marca con una facturación de 3.200 millones de euros en 2023. Además de diez mil discos de vinilo – Marvin Gaye, Kraftwerk, Kim Wilde, Serge Gainsbourg… – se pueden encontrar revistas de vanguardia, algunas copias fotográficas y chocolates de François Daubinet. Y también toda una selección de libros de arte para comprar u hojear (con guantes cuando sean viejos) in situ, que oscilan entre los cuarenta y los 12.000 euros, para las rarezas.

Obras dedicadas a pintores de alto nivel (Matisse, Ed Ruscha, Andy Warhol) o a fotógrafos un tanto monomaníacos (Tom Bianchi, Larry Clark, Erwin Olaf), temas que nunca han pasado de moda (Nueva York de Helen Levitt, la efervescencia de los años 80). por Philippe Morillon…). Ni una sola prenda de vestir en el horizonte y, aún así, “Todo es muy Saint Laurent”, nos cuentan durante la visita. Además de su función de librería chic, cuya selección corre a cargo de Anthony Vaccarello, director artístico de la casa desde 2016, Saint Laurent Babylone acogerá firmas. El fotógrafo Juergen Teller y la modelo Linda Evangelista abrieron la muestra los días 28 y 29 de febrero.

¿Libros y moda? El romance ya lleva un tiempo. Los diseñadores y sus equipos asaltan bibliotecas para encontrar inspiración (desde Jack Kerouac en Dior Men, en 2021, hasta Hanya Yanagihara en Valentino esta temporada), impulsar a los autores hasta la cabecera de las góndolas publicitarias (como Joan Didion posando para Celine en 2015) o tomar lugares que simbolizan la cultura y el conocimiento como telón de fondo (como la Biblioteca Nacional de Francia, donde Kenzo organizó un desfile de moda a mediados de enero).

Toque y mucho tiempo

En los últimos tres años, las casas Dior y Chanel también han comenzado a ofrecer asesoramiento literario y promover la creación de escritos: el primero en forma de vídeos en los que sus embajadoras detallan a sus favoritos o incluso en anuncios que asocian a las mujeres con el festival de París cuyo Las obras breves son objeto, después de haber sido representadas en escena, de una colección publicada por L’Avant-scène Théâtre. El segundo, invitando, en el marco del Rendez-vous littéraires rue Cambon, a la flor y nata de los novelistas contemporáneos (Marie NDiaye, Léonora Miano, Camille Laurens, etc.) a conversaciones eruditas moderadas por Charlotte Casiraghi.

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